domingo, 10 de octubre de 2010

Voy por caminando por Congreso, hacia la casa de mi viejo, una cuadra antes lo veo caminando delante mio hablando por celular. Aunque no da el perfil, le encanta gastar plata en boludeces como laptops y celulares de 3 lucas.
Mientras yo camino y él habla 20 mts mas adelante, veo como un pibe que viene caminando en sentido contrario al nuestro mete un manotazo rapido y se lo saca. Arranca a correr hacia mi lado. Tiene 18 años, ponele, corre concentrado. Cuando me está por pasar por mi derecha inclino el hombro derecho hacia atras y pongo los pies uno por delante del otro para caerme. Lo agarro por sorpresa asique la mano en la pera entra limpia.

El celular esta tirado y sigue conectada la llamada con mi hermana, lo agarro y se lo doy a mi viejo que viene caminando. El pibe se empieza a levantar y me mira. Mi viejo le dice "andate" y dobla en la esquina de Virrey Loreto, donde esta ese hotel lleno de brasileros.

Mientras volvemos me dice: " menos mal que llegaste tarde, sino chau celular". Vamos en el ascensor hablando de una demanda de daños que Camara todavia no resolvio y parece no tiene apuro en hacerlo.

Años de taekwondo de chico, despues kick y de todas las veces que me pelee, nunca lo hice por alguna de esas cosas que uno piensa que vale la pena. Por cosas o por ego.

Hasta un enamorado de la violencia como Hemingway termino odiandola. Pero fascina como pocas cosas.

2 comentarios:

L. dijo...

Esa si que fue una GLORIOSA (y merecidísima) piña...

Tocayo dijo...

Luly: Jajaja, si posta. Era para filmarla y autopromocionarme.